Fuente: http://www.expansion.com/

El cloud computing se ha convertido en uno de los mayores campos de batalla tecnológicos. Gigantes como Amazon, Microsoft, IBM, Google, Oracle, SAP o Salesforce, entre otros, compiten en el negocio de la provisión de capacidades informáticas a empresas vía Internet bajo la fórmula de pago por uso.

Un suculento negocio que ya supone para algunas de estas compañías ingresos anuales superiores a los 10.000 millones de dólares. Es el caso de Microsoft (13.000 millones de dólares anuales), Amazon (11.000 millones de dólares) o IBM (10.200 millones). En el ámbito de las aplicaciones en la nube, Salesforce espera facturar este ejercicio 8.300 millones de dólares. Oracle, algo rezagada (con ingresos de 2.900 millones de dólares) ha comprado NetSuite por 9.300 millones de dólares para dar un salto en este negocio.

El cloud computing es una de las transformaciones más radicales de la industria informática al revolucionar el consumo de tecnología. En vez de afrontar costosas inversiones en centros de datos, las empresas alquilan capacidades informáticas (cómputo, almacenamiento, plataformas de desarrollo, aplicaciones) acogiéndose a la fórmula de pago por uso.

EL MUNDO, EN LA NUBE

No hay vuelta atrás. En 2020 habrá más potencia informática en la nube pública de los proveedores tecnológicos que en los centros de datos privados de las grandes empresas, según Gartner. Además, para entonces, el 30% de los cien mayores desarrolladores sólo venderán aplicaciones cloud.

Esta apuesta por la nube se traduce en un negocio de gran volumen. IDC estima que, en 2020, las empresas se gastarán más de 195.000 millones de dólares en servicios en la nube pública (desde aplicaciones a infraestructura), lo que supone más que duplicar la cifra estimada para este año. El cambio, tímido al principio, toma velocidad al calor de la apuesta de los gigantes tecnológicos y conforme se superan temores relacionados con la seguridad y privacidad.

«Es la fórmula natural de consumo de capacidades informáticas para los emprendedores. En otros sectores, es habitual un modelo híbrido en el que conviven nubes internas privadas donde están los datos clave con un cloud público», explica Angel Moreu, directora de Cloud de IBM España, Portugal, Grecia e Israel.

En Amazon Web Services apuntan las razones por las que muchas empresas dan el salto a la nube: pueden disponer instantáneamente de recursos tecnológicos, se aprovisionan sólo las capacidades que realmente se van a utilizar, los gastos fijos elevados se convierten en gastos variables reducidos, y las compañías pueden dedicarse a su negocio en vez a la tecnología .

«Desde que arrancamos, en Cabify teníamos claro que queríamos dedicar el menor tiempo posible a la tecnología, por eso elegimos la nube. Es fácil añadir nuevas capacidades conforme crece nuestra demanda al expandir el negocio», explica Sam Lown, director de Tecnología de Cabify, que se ha decantado por IBM como proveedor.

También apuestan por la nube grandes empresas como BBVA, que acaba de firmar un acuerdo con AWS. » Nuestras plataformas tecnológicas deben afrontar un crecimiento exponencial de operaciones y las tecnologías de cloud computing contribuyen en ese sentido», señala Ricardo Moreno, responsable global de Engineering de BBVA.

Amazon, la ventaja del pionero

Amazon Web Services (AWS), que arrancó hace una década, se ha convertido en un pilar del crecimiento de Amazon y un negocio clave para la rentabilidad de la compañía. AWS es el proveedor tecnológico para empresas que más rápido ha alcanzado los 10.000 millones de dólares de facturación anual. En el tercer trimestre de 2016, sus ingresos crecieron un 55% hasta 3.200 millones de dólares, convirtiendo a AWS en un negocio con una proyección de ingresos anuales de 11.000 millones de dólares. AWS, con oficina en España desde 2014, tiene más de un millón de clientes activos al mes en 190 países. En España, cuenta como clientes con empresas de todos los tamaños, desde start up como Wallapop, CartoDB o Social Point; a grandes empresas como BBVA, Mapfre o Bankinter; pasando por escuelas de negocio como el IE y entidades del sector público como la Junta de Extremadura.

El ‘cloud’, pilar de la estrategia de Microsoft

El ‘cloud computing’ es uno de los motores de crecimiento de Microsoft, en plena reconversión de su negocio desde el mundo del software para PC. Su oferta incluye desde alquiler de infraestructura hasta software como la suite ofimática Office 365 y la solución de gestión empresarial Dynamics 365. En el último trimestre, los ingresos de servicios en la nube han crecido un 8% hasta alcanzar 6.700 millones de dólares. El negocio que más crece es el ligado a su plataforma de infraestructura informática en la nube para empresas (Azure), que ha registrado un incremento del 116%. La compañía prevé que el negocio en la nube le genere unos ingresos de 20.000 millones de dólares en 2018. El gigante del software asegura que el 80% de las empresas del ‘Fortune 500’ tienen algún servicio ‘cloud’ de Microsoft. En España, la compañía asegura que sube a la nube semanalmente a 1.000 empresas.

IBM, crecimientos del 50%

En el último año fiscal, los ingresos de IBM en ‘cloud computing’ alcanzaron los 10.200 millones de dólares, cerca de un 50% más que en el año anterior. En el tercer trimestre, los ingresos de esta unidad crecieron un 40%. La compañía cuenta con una red de 48 centros ‘cloud’ en el mundo. En Barcelona está uno de los doce en territorio europeo.Entre sus clientes en España se encuentran grandes compañías como CaixaBank, Coca-Cola y El Corte Inglés, así como empresas de menor tamaño como el servicio de alquiler de coches Cabify, la ‘start up’ de medios de pago SetPay y la proveedora de energía ODF.

Google se pone las pilas

Google, que no desglosa las cifras del negocio en la nube, no tuvo la visión de Amazon para detectar la oportunidad que suponía rentabilizar su plataforma alquilando a las empresas capacidad informática. La compañía ha lanzado una ofensiva comercial que le está permitiendo sumar clientes. El contrato más sonado ha sido el que ha logrado con su gran competidor Apple, que utilizará la nube de Google para alojar parte de los datos que guardan los usuarios en su servicio iCloud. Urs Hözle, ejecutivo de Google, afirmó recientemente que, en 2020, la compañía podría llegar a obtener más ingresos como proveedor en la nube que por la venta de publicidad.