Fuente: Lidia Montes, para elmundo.es
Expertos del sector claman por un marco regulatorio y aseguran que la alianza de Apple, Google, Amazon y Facebook con las ‘fintech’ supone el mayor peligro para las entidades bancarias por los datos que poseen
El sector financiero está experiementando un giro hacia las nuevas tecnologías, un hecho que no sólo constata la proliferación de startups fintech sino también las importantes inversiones que se han realizado, como en Ebury, Digital Origin, Kantoxy Spotcap. Desde el pasado mes de octubre el mapa de fintech registradas en España rondaba las 50 empresas mientras un estudio de Moverang realizado el presente mes suma las casi cien según Agustín García, CEO de eFintech Show, el evento celebrado en Barcelona.
La polémica la exponía el propio título de una de las mesas de debate, With or without you, banks. El director de Innovación de Banco Futuro de Grupo Santander, Rodrigo Kuri, aventura que «Apple, Google, Facebook y Amazon son los más peligrosos para la banca». Apunta que, lo cierto es que, si estos líderes tecnológicos empiezan a establecer colaboraciones con las fintech suponen el verdadero riesgo para las entidades. «Como lo fue en su momento para las operadoras y ahí siguen en su lucha», remata Kuri. Indican que el gran potencial se encuentra, precisamente en la ingente cantidad de datos que manejan del usuario, lo que les confiere una importante ventaja competitiva.
Los expertos exponían la necesidad de establecer modelos de negocio en los que el común denominador resulta el código de programación, una estructura financiera escalable y en un ecosistema de aplicación móvil. En este sentido, la controversia pone el foco en que la banca tiene plataformas muy rígidas que no se adaptan al mercado. «No tiene capacidad para generar infraestructuras de forma fácil», sostienen las voces expertas del congreso. En contraposición: «Las posibilidades del sector bancario son muchas pero desde el punto de vista estructural, la rapidez de la fintech le confiere una ventaja que las entidades financieras no tienen», asegura Francisco Estevan, CEO de tufinanciación.com.
Por su parte, el sector bancario se mostró predispuesto a establecer colaboraciónes con las fintech. Una intención de la que el director del Centro de Innovación de BBVA, Gustavo Vinacua, quería dejar constancia haciendo mención a su programa de incubación de startups. «Las fintech por si solas pueden llegar a una escala pequeña, pero necesitarán de los bancos para alcanzar un punto significativo», incidió Kuri. No obstante, en este punto el director general de Paypal en la Península recordó que su empresa no ha ido de la mano de ningún banco y ha podido escalar en todos los países del mundo. Aún así, matiza la diferencia en un escenario español en el que los datos que la banca tiene del consumidor le confieren una situación ventajosa.
Quizás haya dado en el clavo la propuesta de la startup Strand, con un modelo de negocio que, parece, se adapta a las necesidades de la banca. Su propuesta pasa por ser los proveedores de soluciones tecnológicas de las entidades financieras y, en su cartera de clientes, resaltan entidades como Barclays, BBVA, ING o Deustche Bank. «Ofrecemos soluciones de machine learning y big data para competir en la revolución tecnológica. Sabemos que la banca no tiene tanta flexibilidad para desarrollar la tecnología pero nosotros lo hacemos por ellos», resalta el product manager de la empresa, Albert Morales.
Durante las dos jornadas del evento, los expertos hicieron hincapié en la necesidad de establecer un marco regulatorio en el que se pueda desarrollar las fintech. En este sentido, miran a Inglaterra como un referente, un polo donde proliferan las startups del sector gracias a un marco regulatorio estable que lo propicia. «Tenemos que intentar acoger el modelo inglés porque siguen parámetros éticos de actuación que permiten frenar la competencia gris y las malas prácticas», instó Marta Plana en la presentación de la primera Asociación Española de Fintech e Insurtech.
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