Fuente: foundspeople.com
La tecnología aplicada al mundo de las finanzas es mucho más que una moda y tendrá un impacto fundamental en los modelos de negocio de las gestoras de fondos, los distribuidores y los proveedores de servicios.
Segmentación de clientes gracias al uso de macrodatos (big data), comercialización directa a consumidores a través de plataformas D2C, servicios de asesoramiento automatizado, préstamos directos entre pares (P2P), aplicaciones de inversión móviles… Aunque aún está dando sus primeros pasos, la revolución tecnológica conocida como ‘fintech’ ya ha llegado al sector financiero. Conscientes del gran cambio que supone y el impacto que tendrá en los modelos de negocio, la Asociación de la Industria de Fondos de Luxemburgo (ALFI) ha colaborado con Deloitte en la publicación de un informe centrado en el segmento de la distribución de fondos.
“El ecosistema de la tecnología financiera está creciendo rápidamente y está generando mucho interés en casi todos los mercados.La inversión en empresas de fintech se ha triplicado entre 2013 y 2014 hasta alcanzar los 12.000 millones de dólares”, afirman los autores. Aunque la mayoría de esas inversiones (9000 millones) se ubican en Estados Unidos, también crecen en Europa, principalmente en Reino Unido y Alemania.
Ahora mismo, la mayoría de estas empresas de fintech se concentran en el ámbito de los préstamos y servicios de pago, aunque existe un número significativo de iniciativas en los segmentos de inversión retail e institucional. “Gracias a unos menores costes fijos, una mejor experiencia de cliente y una mayor eficiencia, las empresas de fintech suponen una amenaza para las áreas de banca e inversión. Aunque muchas nunca tendrán el tamaño o el alcance de las grandes firmas internacionales, algunas crecerán lo suficiente para ganar una importante cuota de mercado. Por eso, las gestoras de activos deben prestarle atención a este fenómeno y actuar cuanto antes”, señala el informe, que vaticina que las gestoras de mayor éxito serán aquellas capaces de adaptar sus estrategias de marketing y la gestión de sus productos a una nueva generación de inversores a través de la tecnología financiera.
“Fintech es mucho más que una moda y tendrá un impacto fundamental en los modelos operativos de las gestoras de fondos, los distribuidores y los proveedores de servicios, que ya se enfrentan al cambio en el comportamiento de los inversores”, señala la presidenta de ALFI, Denise Voss. “La industria de la gestión de activos tiene una oportunidad única para reimaginar y modernizar su modelo de distribución”.